La responsabilidad social empresarial o RSE, es un método de autorregulación que las empresas aplican para contribuir al desarrollo de la sociedad. Esta política, cada vez más implementada por las organizaciones alrededor del mundo, incentiva a los empresarios a participar de iniciativas que generen un impacto positivo en el medio ambiente, la sociedad y a su vez en los empleados.
La aplicación de buenas prácticas de responsabilidad social empresarial, son un elemento imprescindible para que una empresa pueda mantenerse en el tiempo siendo competitiva. Hoy en día, los consumidores valoran a las organizaciones socialmente responsables y es algo que tienen en cuenta a la hora de convertirse en sus clientes. Una situación muy similar sucede con los inversionistas, los cuales buscan startups que resuelvan una o varias problemáticas sociales, ya sea a nivel local o mundial.
¿Cómo puede una empresa ser socialmente responsable?
La responsabilidad social empresarial se basa en un compromiso por el mejoramiento del entorno social y ambiental, sin dejar de lado el crecimiento de la compañía y toda empresa, no importa del tamaño que sea, puede ser generosa y contribuir al desarrollo, ya que existen pequeñas acciones que hacen la diferencia y que se pueden implementar sin una mayor inversión de recursos.
A continuación te compartiremos algunas estrategias que puedes aplicar para contribuir con una causa social o medioambiental y ser una empresa socialmente responsable.
La generosidad comienza en la casa:
Una empresa socialmente responsable, no puede ser generosa en la calle y desconsiderada dentro de la organización. En lo primero que tiene que pensar es en ser justa con sus empleados: pagar sueldos acordes a sus labores y que cumplan con los requerimientos de ley; brindar incentivos a los trabajadores, recordando que ellos son una herramienta indispensable para alcanzar los objetivos propuestos en el plan de negocio. Además, se debe tener en cuenta que los espacios laborales deben ser aptos y seguros y procurar que haya un buen ambiente laboral.
Disminuye el impacto energético de tu organización
Esta es una de las estrategias que más aportan a la sociedad y es algo muy fácil de hacer. Realiza cambios que reduzcan el consumo de energía en tus oficinas, como utilizar iluminación led y sistemas ahorradores de agua. Puedes también realizar periódicamente jornadas de teletrabajo y controlar el uso que tus empleados le dan a los aparatos electrónicos, para que estos no estén encendidos mientras no se estén usando.
Impacta positivamente en tu entorno local
Las empresas son impulsoras sociales, ya que generan empleo y desarrollan productos o servicios que brindan soluciones a las personas. Una manera de impactar en tu entorno es contratando trabajadores pertenecientes a comunidades vulnerables, como por ejemplo, discapacitados, madres, cabeza de familia, desmovilizados, entre otras.
- Únete a una causa social a través de una fundación
Existes muchas organizaciones que promueven causas sociales y que se sostienen con recursos que aportan las empresas privadas y públicas, ya sea en dinero o en especie (voluntariado). Puedes escoger una actividad en la que quieras participar como por ejemplo mejorar la educación, promover la paz, cuidar el medio ambiente, etc. Cuando tengas escogida tu actividad, revisa las organizaciones que se dediquen a ella y luego invita a tus clientes y empleados a participar.
Recicla
Esta estrategia también es muy fácil de implementar, ya que se deben realizar acciones simples, pero que generan un impacto positivo en el medio ambiente. Recicla materiales como papel, cartón, metal y plástico. Ubica dentro de la empresa basureros que permitan separar los residuos orgánicos de los inorgánicos, incentiva a tu equipo de trabajo a evitar utilizar papel innecesariamente y acostumbra a tus clientes a recibir comprobantes y facturas electrónicas.