La deforestación en La Amazonia, pulmón del planeta, ha aumentado alrededor de un 22% durante el último año. Si bien hay compromisos políticos internacionales, es importante que como individuos conozcamos esta realidad y tomemos acción.
En tan solo un año La amazonia ha perdido alrededor de 13.235 kilómetros cuadrados de bosques. Aunque Brasil es uno de los países que en la pasada cumbre internacional de Glasgow se comprometieron a trabajar en pro de la reforestación para el año 2030, el último informe elaborado por el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) reveló que la deforestación ilegal entre agosto de 2020 y julio de 2021 aumentó un 22% en comparación con el periodo anterior.
El balance en la política ambiental de Brasil puede no ser esperanzador, el área que fue deforestada en el último año alcanza el tamaño de países como Jamaica o Qatar, y estudios ambientales afirman que la deforestación conlleva a perder los bosques saludables, lo que significa que hay algunas zonas de la selva amazónica que han pasado de combatir la crisis climática, a emitir más CO2 del que absorben.
Mientras internacionalmente se levantan presiones para mitigar el daño ambiental en la amazonía, como la prohibición de la Unión Europea (UE) a la importación de productos vinculados a la deforestación, el gobierno de Brasil busca aprovechar el potencial económico de la zona. De la misma forma, y de acuerdo a investigaciones realizadas por el New York Times, el sector ganadero, que trabaja bajo dinámicas de ilegalidad, representa una de las amenazas más importantes para este ecosistema de importancia mundial.
Como ONG ambiental, estas son cifras que nos preocupan, sin embargo, nos impulsan a seguir trabajando por la reforestación y la disminución del daño ambiental. Este aumento en la deforestación supone, no sólo un riesgo para Brasil y su territorio, sino para el planeta entero, pues se trata de un ecosistema que alberga gran biodiversidad y que tiene la capacidad de refrescar el planeta y contribuir a frenar el calentamiento global.
Es por esto, que creemos firmemente que pequeñas acciones contribuyen a generar grandes cambios. Como individuos y parte de una comunidad, sea familiar o empresarial, tenemos la responsabilidad de concientizarnos sobre los problemas de nuestro planeta y estamos llamados a tomar acción en ellos.
Fuentes consultadas
elpais.com
cnnespanol.cnn.com
caracol.com.co
www.nytimes.com