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El desarrollo sostenible se ha convertido en una de las principales preocupaciones de la sociedad en la actualidad. Para mantener la vida del planeta tierra tal y como la conocemos se requiere de aprovechar los recursos naturales que esta nos brinda. Es por esta razón, que el desarrollo sostenible aparece como la alternativa que puede vincular el crecimiento económico y el avance tecnológico con el aprovechamiento responsable de los recursos naturales.
Entendiendo esta necesidad de desarrollo, sin dejar de lado al medio ambiente, es que surge la figura de Reservas de la Biósfera. Surgen hace 50 años gracias al Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB) de la UNESCO. Esta figura se reconoce internacionalmente, pero que se mantiene bajo la soberanía del país respectivo.
En cuanto a sus funciones, se reconocen tres (3): la conservación, el desarrollo y el apoyo logístico. La conservación hace referencia a proteger los recursos. El desarrollo se refiere tanto a desarrollo humano como económico de manera sostenible. La función de apoyo logístico para fomentar actividades educativas y de investigación, que estén encaminadas tanto al interés local como a la conservación y protección ambiental.
Alrededor del 5% de la superficie terrestre está cubierta por dichas Reservas. El país con mayor número de reservas en el mundo es España, que cuenta con alrededor del 12% de su territorio nacional clasificado como Reserva de la Biósfera.
En el caso de América Latina, son 22 países los que cuentan con estos ecosistemas: México es quien lleva la delantera con 42 reservas nacionales que ocupan alrededor de 62 millones de hectáreas. En Colombia contamos con 5 de estas reservas: El Tuparro, Cinturón Andino, Ciénaga Grande de Santa Marta, Sierra Nevada de Santa Marta, Seaflower. El área ocupada por estos ecosistemas es alrededor de 24 millones de hectáreas, divididas en: 24% en zona continental y 76% en zona marina costera.
La importancia de estas reservas radica en que son zonas que son importantes de conservar, pues cumplen funciones de sumidero de CO₂ y otros Gases de Efecto Invernadero. Además de su importancia ambiental, son zonas en las que se busca promover la investigación, la concientización, adopción de prácticas innovadoras que faciliten el desarrollo sostenible y contrarresten la pérdida ambiental.
Nos encontramos en un punto en el que todos los sectores de la sociedad debemos tomar acción para procurar un mejor futuro ambiental. Los gobiernos y las empresas deben buscar estrategias responsables y encaminadas a aprovechar los recursos y no a explotarlos. Sin embargo, nosotros como individuos también debemos ser responsables de nuestro papel protagónico y actuar en consecuencia.
FUENTES CONSULTADAS
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